Este artículo es el tercero y último (por ahora) sobre el tema de estar en paz con la legalidad.
En el primero hablaba de qué áreas suelen tenerse que atender en general a partir de lo que ocurre en 2022 en España, de la diferencia entre normas y leyes, y del momento en que te arremangas y decides solucionar esos temas. También esbozaba que hay dos grandes caminos:
DIY (si a partir de ahora ves estas siglas por ahí, ya sabrás lo que significa: Do It Yourself, o para entendernos, hacerlo por ti misma, por ti mismo).
En este artículo me voy a centrar en los retos que supone hacer los trámites legales por tu cuenta, en los obstáculos que solemos tener que atravesar y algún truco que pudiera servirte si lo aplicas.
Definición (en lenguaje común): requisitos, pasos o acciones reguladas por alguna administración que debemos efectuar para acceder a un derecho, ejercer una actividad o similares
Dicho eso, estamos en un punto en el que hay que hacer unos trámites legales y por el motivo que sea has decidido hacerlo por tu cuenta y riesgo. (los dos artículos previos de esta serie han abordado otras opciones).
Para llegar a este punto, forzosamente has hecho ya un trabajo que te ha llevado a más o menos identificados. Digo más o menos, porque es lo habitual. Al menos en mi país, suele pasar que una no sabe bien todo lo que tiene que hacer de golpe, si no que se va descubriendo en el camino. Creo que en tu país será parecido. ¿Cuáles han sido esas acciones y cuáles aparecerán?
Identificación
Generalizar en los trámites administrativos es pedir demasiado para un artículo porque puedes tener que solucionar temas tan variopintos como un tener permiso de residencia si no eres nacido en el país, hacer un contrato de alquiler o darte de alta como auto-empleo, por decir algo.
Pero de algún modo ha pasado lo siguiente:
Algo o alguien te dice que necesitas un documento que de prueba o constata un derecho a tener o a hacer algo Ej.1, tener algo: el documento es la escritura de propiedad y lo que tengo es un piso. Ej.2, hacer algo: el documento es el pasaporte y lo que puedo es subir a un avión para Perú.
Te has informado. Hay varios caminos para informarse de los que mencionaré los más representativos. Aquí siempre hay que entender (y no me cansaré de repetirlo) que la veracidad de la fuente es fundamental. Algunas veces (incluso muchas) se concede ‘autoridad’ a fuentes sin contrastarlas. No lo hagas, si es un tema importante haz las preguntas que te permitan confiar con conciencia.
Preguntar a alguien que sabe y entender la respuesta. (pagando o no). A veces puede convenir pedir una consulta profesional como una gestoría, gabinete de abogados o de ingeniería por ejemplo. Cuando preguntamos a un amigo que se supone que sabe está muy bien, pero a veces no saben lo suficiente si no se están dedicando a ese tema profesionalmente. Por ejemplo, puede ocurrir que tu amiga estuvo trabajando mucho tiempo en el Registro Civil y sabía mucho de los procedimientos de extranjería, pero hace 5 años que ya no está y las leyes pueden haber cambiado.
Y por supuesto, siempre está la propia sección de información de la administración en concreto a la que se refiere el trámite.
Estudiar, formarte y aprender de eso que quieres saber. Hay muchas plataformas de cursos para ello. También, gratuitas o de pago. Siguiendo con el ejemplo anterior, yo he hecho una búsqueda «derechos inmigración extranjería» y la plataforma euroinnova ya tiene un curso. Otros sitios guapos para aprender son Mooc.es , edX y UniMOOC. Habrán más, seguro!!!
Investigar sobre el tema en fuentes contrastadas. Aquí tienes el mundo de los libros, los blogs, de youtube y otros tantos.. (nota: para el tema de auto-empleo por ejemplo el sitio de getquipu es una fuente posible, por supuesto hay muchos otros blogs como quaderno, billin, infoautonomos…
Te ha parecido que has entendido lo que tienes que hacer, y también te parece que tienes lo que hace falta para hacerlo bien. Es decir, no sólo sabes que tienes que hacer unos trámites en el Registro de la Propiedad (si estás alquilando tu vivienda a una gente por varios años), sino que sabes qué documentos en concreto son los que has de hacer, cómo se rellenan o cómo se redactan, y te ves capaz de hacerlo con bastante fiabilidad porque entiendes lo que escribes y lo que firmas.
Decisión de hacerlo.
Tras esos 3 pasos, has tomado la decisión de hacerlo. Súper. Pero si aún no las tomado probablemente es porque tienes dudas.
Para ello te quiero regalar una herramienta ‘soniadaptada’ del curso de gestión de cambios de Gloria Méndez que se llama Triangulación y que viene a ser el típico pros y contras, pero:
Con un orden específico: título de la decisión y subtítulo (qué es lo que me importa más en esa decisión)
Escribiendo con papel y boli los pros de todas las opciones (lo hago yo, lo hace Fulanita, no se hace,…)
Déjate sentir qué opción apunta maneras, te va gustando más.
Ahora escribes los contras de cada una
Y déjate sentir. Sentir. Has reflexionado, tienes los datos, ahora decide con el sentir. El sentir viene de las sensaciones anímicas y también físicas. ¿Cómo sientes tu cuerpo en cada opción? ¿Se crispa o duele en alguna de ellas?
Decide. Lo sé, a veces no puedes decidir porque a pesar del análisis las opciones son más o menos igual. Ninguna decanta. Ninguna luce mucho mejor que el resto. Bien, en este caso puedes usar el truco de los ‘criterios’. Si aún siendo diferentes es sus más y menos, a efectos del sentir son parecidas, hay el criterio (eps, eligelo con criterio, si?) de:
la más fácil
la más rápida
la más cómoda
la más corta
la más barata
la que me da más marcha
…
Estrategias para realizar trámite legales
Aunque ya está esbozado, si la acción a realizar la ves como sencilla, no ha lugar a pensar en estrategias. Lo haces y punto.
El problema es cuando:
No entiendes lo que se ha de hacer Ejemplo, el contrato de alquiler a una empresa (en lugar de a vivienda habitual): hacer trimestralmente el 115, el 303 y anualmente el 180 y el 390 (y no tienes ni idea de qué significa eso)
Lo entiendes pero no te sale bien Ejemplo, con el famoso contrato de alquiler: resulta que consigues tu certificado digital y consigues entrar en la página de la agencia tributaria, y haciendo acopio de paciencia y con algún tutorial has entrado al lugar adecuado a hacer tu modelo 303, y rellenas todo como ha de ser pero te da un error. Paciencia!. Si sale un error, hay un motivo. Al menos uno. Muchas de las páginas webs de la administración son poco ‘amigables’ pero ayuda saber que se puede conseguir presentar el dichoso 303 con éxito.
Voy a compartir aquí alguna idea sobre cómo avanzar eficazmente cuando pasan algunas cosas bastante habituales.
E independientemente de ello, te recuerdo que me encanta y me dedico a ayudar a desbloquear y a movernos en la dirección del objetivo. Hay varias opciones y una son las llamadas mentorías personales trimestrales, y también en la versión de mentorías para emprendimientos!.
Cuando no lo sé hacer el trámite legal
Si no sabes toca aprender. Decide cómo. Elige el sistema que más fácil se te ponga si te lo puede permitir y si no ve a los criterios que he comentado cuando hablaba de la herramienta Triangulación, recuerdas?.
Estamos en el artículo del DIY, si?. Porque siempre puedes delegarlo, obvio, y es una opción a considerar especialmente si se te pone muy cuesta arriba. Pero esa vía está analizada en el artículo anterior.
El reto de aprender
Apela a tu curiosidad, pon ese modo en ON. Lo demás vendrá casi solo. Y escucha una cosa, si has de aprender algo y ahora no te ves con esa energía ni suficiente motivación, quizá es buena idea pensar en otra solución diferente al DIY.
Aprender da sentido a la vida siempre que te suma más de lo que te resta. Y ojo, no nos engañemos, siempre resta algo, sea tiempo, sea dinero, sea fuerzas, sea sueño, sea temple, sea relaciones, sea equis. Pero importa que lo que suma sea más, más comprensión, más auto-realización, más conocimiento, más empoderamiento.
Cuando sí se hacer el trámite legal y postpongo / procrastrino
Pues bien, en las dificultades no sabemos cuál es la solución y obvio, hemos de encontrarla primero. Pero, después de «saber» cuál es la solución, hay que hacerlo!. Y seguro que te ha pasado montones de veces que sabes, pero no lo haces!
Bien, en este caso encuentra los motivos reales por los que quieres hacer ese trámite, conéctate con ellos, conéctate con el placer que ganas por tenerlo resuelto y conéctate con el dolor que te ahorras por tenerlo resuelto. Normalmente funcionamos o por un canal o por el otro, pero yo pongo los dos y así siempre aciertas!
Ésto lo he escrito así, pim pam, y quizá no le des importancia, pero es fundamental. Hazlo. Llámame si necesitas ayuda.
Sin motivo (consciente o inconsciente) no hay acción. Y si el motivo de no hacer algo es inconsciente (lo cual fácilmente estará ocurriendo si estás procrastinando), esa instrucción te puede dar tanta luz que te auto-desbloquees más fácil de lo que piensas.
Nota lo que ocurre cuando está hecho, viene el duelo junto con la satisfacción.
Aunque esto te suene raro y en la mayoría de trámites tontos pasará desapercibido, en los más serios es bueno que sepas que pasarás por un duelo al conseguir hacer con éxito ese trámite.
Aunque en muchos casos te parezca de sentido común, es útil saber que funciona así y que es bueno para llegar a buen fin. Cuando conseguimos algo que queríamos, junto con ello hay un duelo.
Hay un duelo de lo que ya no tenemos, y lo que esa situación tenía de positivo:
mientras no me dí de alta en la cotización oficial no tenía que pagar: el duelo (uno de ellos, es pagar)
mientras aún no era ‘autónoma’ (a efectos fiscales), no tenía que hacer paperassa engorrosa
mientras no tenía alquilada la vivienda, no tenía que resolver conflictos con los inquilinos
mientras no había parido a mi primer bebé podía dormir toda la noche del tirón
mientras aún no había acabado mis estudios, la mente tenía el foco claro de acabarlos
mientras zarandeaba de aquí para allá con trabajos de poca responsabilidad me sentía libre para cambiar fácilmente
etc.
Pero obvio, también viene la satisfacción. Felicidades.
El reto de emprender y ser «impecable» en lo legal
Escribía sobre la impecabilidad hace un tiempo.
Mira, voy a hacer un resumencísimo de una de mis bases fundacionales como acompañante a cambios y a emprendimientos que se llama Triformación Social.
Viene a decir que todo el engranaje social en el que vivimos se puede asignar a una de las 3 siguientes esferas y que cada una de ellas tiene su valor que le insufla salud. Cada uno de esos valores colocados en la esfera equivoca genera enfermedad social, pero eso lo trataré si acaso en otro artículo.
Son:
Esfera
Valor Sano social-empresa
Ejemplos
Cultural
Libertad – Creatividad
Salud, Educación, Arte, Agricultura, Ideología, Religión, etc
Todos dependemos de todos y de los recursos de la naturaleza
Si aplicamos esos 3 valores a un emprendimiento, incluso que sea un auto-empleo, la impecabilidad en lo jurídico político significaría tener todo lo legal en orden.
Si bien es cierto que el objetivo es estar impecable en lo jurídico político (en general, no sólo en los auto-empleos o empresas), también es cierto y esta es mi conclusión, que el equilibrio de creatividad + impecabilidad + sostenibilidad se retroalimentan.
Si por ser impecable en un auto-empleo me constituyo legalmente, pero no tengo la suficiente creatividad para solucionar problemas y poner mi iniciativa en el mundo de forma adecuada, ni soy económicamente sostenible (Ingresos menos gastos mayor que cero: I – G > 0), estar pagando impuestos y tasas y demás (o generando deuda por no poder pagar) es un desequilibrio con consecuencias.
Y en el resto de aspectos que no son auto-empleos, sirve igual. Si he de hacer un trámite y conozco los motivos de tener que hacerlo + las consecuencias (físicas, emocionales y mentales) de sí o no hacerlo voy a poder tomar la decisión más coherente en este momento. Y eso es lo que te dará paz a la hora de ir a dormir. Tu coherencia.
Este artículo tampoco es un manual de nada, pero pretende ser un texto que te inspire a estar a gusto con tus temas legales.
Y por supuesto, a vuelta de correo te contesto a cualquier sugerencia, comentario o propuesta que quieras compartir!
Suscríbete ahora al boletín de noticias.
Muchas gracias por la confianza que implica tu suscripción. Te hemos enviado un email para que confirmes tu suscripción y pronto recibirás un nuevo artículo.
Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible.
La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.
Cookies estrictamente necesarias
Las cookies estrictamente necesarias tiene que activarse siempre para que podamos guardar tus preferencias de ajustes de cookies.
Si desactivas esta cookie no podremos guardar tus preferencias. Esto significa que cada vez que visites esta web tendrás que activar o desactivar las cookies de nuevo.
Cookies de terceros
Esta web utiliza Google Analytics para recopilar información anónima tal como el número de visitantes del sitio, o las páginas más populares.
Dejar esta cookie activa nos permite mejorar nuestra web.
¡Por favor, activa primero las cookies estrictamente necesarias para que podamos guardar tus preferencias!