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¿Qué es ecología?
Ecología = estudio del hogar, ¿lo sabías?
Pues sí. Resumiendo, esta palabra viene del griego, de oikos que significa «hogar» y de logos que significa «tratado o estudio». (nota: logos es una de esas palabras muy muy profundas, pero para este artículo nos quedamos con esa sencilla traducción, si?).
Otra definición es: el estudio de las interacciones que tienen los seres vivos entre sí y con el medio que les rodea.
Esto tiene implicaciones, porque seguro que pensabas, como la mayoría de personas, que era tener cuidado del medio ambiente. Y lo es. Pero no sólo.
En realidad, si tomamos este significado: «el estudio del hogar, o «el tratado del hogar», o «la inteligencia del hogar», o «el pensamiento del hogar», podemos entender por qué hay tantos tipos de ecologías.
Y eso es porque «hogar» son muchas cosas que van desde nuestra planeta tan precioso, desde esta Tierra impresionante que cuanto más la observamos más nos maravilla (y si no te pasa eso, probablemente la observas regulín, o no sé, lo hablamos!), hasta el propio cuerpo, la casa donde vivimos, el pueblo o ciudad, etcétera.
Así que tenemos ecología en:
- el sistema biológico del cuerpo humano
- medio ambiente
- urbana, industrial y comunidades
- autoecología
- incluso matemática (sip)
A efectos de este artículo entendemos que algo es ecológico cuando las interacciones dan como consecuencia una coherencia, un estado comprensible y evolutivo.
Y por oposición algo no es ecológico cuando en esas acciones con el entorno hay incoherencias de base, o tenemos como consecuencia estados comprensibles pero involutivos.
Voy a entrar mínimamente en dos ecosistemas habituales:
- en mí conmigo misma y mi entorno a lo que llamaré: ecología en la vida personal.
- en los autoempleos y/o empresas.
¿Qué es la ecología en lo que a vida personal se refiere?
En este sentido, estudiar desde el punto de vista ecológico la vida diaria, es observar y sacar conclusiones del vínculo entre yo y mi entorno (vivienda, familia, relaciones y demás).
Entenderemos que es ecológica si hay una cierta armonía, si los desequilibrios (conflictos, insuficiencia de recursos, circunstancias externas disruptivas) se tratan como procesos y encuentran de una forma orgánica un nuevo estado relativamente estable.
En general tenemos claro la ciclicidad en la historia, en los territorios, en las familias, e incluso en nuestra vida cuando la miramos con perspectiva, pero en la dimensión individual y cortoplacista no siempre somos capaces de verlo. Por eso es importante prestar atención a ello.
Indicadores como:
- irse a dormir en paz, y más días con la mente en calma que hecha un torbellino.
- tener de forma natural muchos más sentimientos y pensamientos constructivos que destructivos.
- en el cotidiano, en tu vivir habitual, los momentos tienen bastante más confianza que desconfianza,
- haber hecho o estar en ello: STOP definitivo a crítica, mentira, culpables
Nota: mi misión para colaborar al máximo para que eso sea así para tí y para el máximo posible de personas, así que me encuentras a tu servicio con las mentorías o de muchas otras formas.
¿Quieres saber cómo de ecológica es tu vida, cómo de sana es la relación con tu entorno en general?
Pues dale, de 0 (peor imposible) a 10 (mejor imposible), valora cada uno de los 4 puntos anteriores.
Mi media, honestamente hablando a día de hoy está en 8. Y me lo curro para mantenerla y mejorarla.
¿Y la tuya? ¿Dónde está? Si está debajo de 6, llámame. A mí o a alguien en quien confíes para que te haga de espejo sano y limpio donde veas que:
a) toca ya cambiar algunas cosas.
b) qué cosas en concreto pueden ser las primeras.
Mira, sólo que seas muy honesta en la respuesta, sea la que sea, ya está trabajando a tu favor. Nadie tiene que saber que te estás haciendo estas preguntas. No se trata de si duermes del tirón o te despiertas 4 veces por la noche. Se trata de cómo de en paz está tu mente, en esta época, en estas semanas o meses, cuando te vas a dormir. Y así sigue con el resto.
¿Qué es la ecología en el marco de la empresa o autoempleo ?
El trébol de cuatro hojas es un modelo de comprensión de lo empresarial desde un punto de vista orgánico, ecológico podemos decir. Viene del mundo de la antroposofía, y según mi profe Luis Espiga de Triform Institute, fue creado por Bernard Lievegoed.
Pues bien, en ese trébol, las 4 hojas representan:
- la hoja de identidad
- la hoja de relaciones, que es de lo que trataría este tema.
- la hoja de procesos y procedimientos
- la hoja de recursos
Años codo a codo con personas que tienen emprendimientos (tienes los detalles de cómo lo hago ahora) que llevan adelante proyectos, sueños, empresas, comunidades, asociaciones muestra cómo de básico es que es el cuerpo de relaciones, que ese ecosistema del que la iniciativa forma parte, sea visto , analizado y sanado.
Las relaciones al final se materializan, toman forma en el modo en que interactuamos dentro del emprendimiento, con cada una de las personas y restos de partícipes. Desde lo a gusto que te sientes con el sistema operativo del ordenador hasta el estado de ánimo con que riegas las plantas, pasando por la forma en que saludas a vecinos, y no digamos a clientes, todo ello forma parte del alma, ánima o cuerpo de relaciones de la empresa de alguna manera.
Bajo esta mirada, la forma que tenemos de ser ecológicas sería tener una empresa con relaciones sanas, si bien (aunque sea obvio, me parece pertinente escribirlo) los procedimientos y los recursos también son parte sine qua non.
¿Cómo hacemos para tener relaciones sanas?
Básicamente hay dos variables:
UNO: conocer con quien interactúo (visible o no visible).
Ejemplo: Aunque nunca hable con nadie del banco, éste forma parte de las entidades del ecosistema y las relaciones con él (las personas que llevan allí la gestión) han de ser sanas.
DOS: interactuar acorde a los valores que generan salud en cada relación.
¿Cuál es la mejor manera en este ejemplo?:
- Pues que el banco sea afín a mis valores, al menos si me importa lo que va a hacer con mi dinero. – – Que la cuenta no se quede en números rojos.
- Si han de venir épocas económicamente difíciles, hablar con quien lleva la dirección o conseguir financiación de algún otro modo.
- y alguna más que me pueda estar olvidando
Es decir, actuamos coherentemente con los valores, por lo que es muy útil identificarlos. Casi nadie se para a pensar y responder esta pregunta: ¿qué valores hacen que la relación de mi empresa con esa entidad/persona sea sana?.
Esa entidad en el ejemplo será el banco, pero me refiero a cada uno de los roles que están en nuestro campo de acción: clientes, vecinos, colegas, colaboradoras, formadores, alumnos, entidades oficiales varias, pares, etcétera.
Comportamiento ecológico de las empresas
Así pues hay dos grandes campos en los que me gusta dividir el comportamiento ecológico:
Ecología en lo material o tangible, visible
Nos decía entre otras cosas Ana López, directora del departamento de marketing y comunicación de Fonvirtual, en una versión antigua de este artículo:
a) Cada vez más, la sociedad está tomando conciencia de los problemas medioambientales que conciernen a este planeta, y están intentando arreglarlo. Si bien es cierto que es un proceso lento y complicado, la responsabilidad con el medio ambiente es una demanda social que está en aumento, por lo que para las empresas actuales, es esencial ser ecológico y responsable.
b) Las empresas ecológicas tienen mayor aceptación entre los consumidores, y según las encuestas, la abrumadora cantidad de casi el 90% de los consumidores prefieren consumir productos ecológicos, o que vienen de empresas con certificados o logos aprobados por los mecanismos medioambientales.
c) La importancia de crear una empresa ecológica reside en el compromiso, es muy fácil falsear la realidad y hacer creer a los consumidores que eres un negocio “verde” pero tarde o temprano, todo sale a la luz. El compromiso interno es la parte más importante en este proceso. Ser coherente en el equipo si lo hay, y mantener una relación con proveedores, clientes y medios que refleje el enfoque de la organización.
Ecología en lo no material
Pero desde la mirada de este artículo, para ser ecológicas en nuestra empresa no es suficiente cuidar el entorno material y ambiental. También queremos cuidar el entorno no visible, el emocional, el vital y el espiritual porque están continuamente interactuando.
La dificultad reside en:
- la falta de pedagogía, cultura tradicional y educación al respecto.
- la falta de importancia que le damos.
Ambas cosas, aunque aún quede mucho camino por recorrer, ya están cambiando en muchas áreas de la vida empresarial a lo largo y ancho del planeta, y bajo mi punto de vista, esa expansión es imparable.
Digan lo que digan los medios de comunicación y la tendencia pesimista con la que vemos y verbalizamos nuestro presente y futuro inmediato, particularmente en mi entorno empresarial y profesional, todas las personas están en esta línea de ser cada vez más ecológicas en sus empresas. Y son consecuentes. Yo soy optimista en este sentido.
Los recursos básicos para avanzar en este camino están:
- en algunas políticas institucionales (un ejemplo es poner fácil el reciclaje material).
- en una capacidad de usar la tecnología que puede, si se quiere, optimizar de todo. Usa y adquiérela con coherencia y si tu iniciativa es creadora de aparatos e ingenios mecánicos, eléctricos o electrónicos, no uses la obsolescencia programada.
- en una red de acceso a conocimientos y experiencias para el crecimiento personal al abasto de casi todo el mundo con internet, con las bibliotecas, con entidades sociales presencial o virtualmente.
Por ahora lo dejamos aquí aunque obviamente este tema que puede ser apasionante da para muchos artículos y si te apetece que lo comentemos, sencillamente, escríbeme!